La pandemia ocasionada por el Coronavirus ha obligado al sector salud a enfrentar situaciones a las que no estaba acostumbrado. Una de ellas ha sido cómo abordar el contexto en el cual los pacientes viven sus últimas horas, dadas las restricciones sanitarias establecidas en las visitas hospitalarias. De esta forma, algo tan habitual y humano como sentirse acompañado durante los últimos momentos de la vida, hasta hoy era inviable, en una de las aristas más dolorosas de la pandemia.

De igual forma, la criticidad de aquellos pacientes afectados por el virus que además presentan una avanzada edad o enfermedades progresivas o incurables, hizo que un equipo multidisciplinario del Hospital Barros Luco, encabezado por la Directora del recinto, la Dra. Gisella Castiglione y asesorado por el Comité de Ética del hospital y el Comité Covid, tomara la decisión de aperturar la primera Unidad de Cuidados Proporcionales, UCP, del sistema público, lugar donde estos pacientes, posterior a recibir una adecuación en su tratamiento, pudiesen ser derivados para recibir los cuidados correspondientes y de esta forma, sobrellevar sus últimos días.

“Elaboramos un protocolo que considera la proporcionalidad en el  tratamiento; es decir, que sopesa las secuelas que puede dejar una terapia invasiva en una persona Covid (+) de edad avanzada, con una patología base y en este contexto, cómo esta intervención invasiva podría ser más perjudicial que beneficiosa para su salud”, dice Gisella Castiglione, quien agrega que “en este contexto, estos pacientes, tras la evaluación de profesionales de distintos servicios, son  derivados a la Unidad de Cuidados Proporcionales para continuar con su tratamiento de base, lo cual posteriormente se informa a los familiares”, dice.

La UCP comenzó a funcionar en mayo liderada por el equipo de Alivio del Dolor y Cuidados Paliativos, con el objetivo de brindar apoyo, acompañamiento y dignidad a los pacientes, durante su última etapa de la vida, estableciendo un puente de comunicación con los familiares. “De esta forma, humanizamos la atención de salud, desmitificamos la muerte en soledad de los pacientes y como hospital, nos hacemos cargo de todo el ciclo de una persona”, asegura Castiglione. 

La unidad además cuenta con el apoyo de Psiquiatría de Enlace en los casos en los cuales la familia requiere de soporte emocional durante el proceso. También se cuenta con tablet y teléfonos móviles, mediante los cuales se establece la comunicación entre los pacientes y sus familias.

Agradecimiento de las familias

A la fecha, 92 pacientes han pasado por la unidad y cerca de medio centenar ha sido visitado por sus familiares, quienes deben cumplir con las mismas normas de seguridad que el personal de salud. Fernanda Larenas (32), visitó la Unidad de Cuidados Proporcionales para ver a su abuelo, quien llevaba dos semanas hospitalizado tras haber resultado Covid (+). La familia, luego de asimilar la enfermedad, se tranquilizó al saber de las condiciones en las que él se encontraba. “Estoy feliz. Fue una alegría y una paz enorme poder haber hablado con él a pesar de su estado de salud. Me pudo preguntar por la familia y yo, darle la tranquilidad de que estábamos todos bien”, dijo Fernanda.

“Hemos recibido una retroalimentación sumamente positiva respecto de esta unidad que además, sabemos, está siendo replicada en otros centros asistenciales y que incluso la ha llevado a ser reconocida por medios nacionales e internacionales y en ese contexto, considerando que nos debemos a las personas y en respuesta a la tremenda labor del equipo de Cuidados Paliativos, esta unidad buscaremos mantenerla y progresivamente tratar de ir potenciándola”, dijo Gisella Castiglione. 

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