El procedimiento, también conocido como prótesis lateral de tobillo, se está llevando a cabo progresivamente en Chile y en el sistema público, representando una serie de beneficios para las personas.

Las articulaciones son estructuras anatómicas que están compuestas por partes óseas y partes blandas que permiten el movimiento. En éstas se encuentran los cartílagos articulares, los cuales, al sufrir algún tipo de daño producto de un traumatismo, una enfermedad inflamatoria o a causa del deterioro natural que genera el tiempo, se produce la artrosis, lo cual conlleva a una impotencia funcional.

«El tobillo es una de las articulaciones más importantes en el ser humano, pues soporta el peso del cuerpo y mantiene el equilibrio, permitiendo dar movimiento en la marcha, lo cual es fundamental para el desarrollo de las personas y en ese contexto, hay diversas maneras para tratar una artrosis en esta parte del cuerpo, dependiendo de la gravedad de la lesión», dice el Dr. Carlos Villarroel, cirujano traumatólogo del centro asistencial.

Una de ellas es la artrodesis, cirugía que consiste en remover todo el cartílago articular y fusionar, de manera permanente, dos huesos o más para que no exista movimiento entre ellos. En tanto, otra alternativa es la artroplastía o prótesis, la cual busca preservar el movimiento natural de la estructura afectada.

Respecto de esta última opción, el especialista explica que históricamente «la prótesis articular ha sido abordada desde la zona anterior de la estructura, sin embargo, gracias a esta modalidad de intervención, la prótesis se coloca de manera lateral; es decir, desde donde se ubica el peroné a nivel del tobillo», dice Villarroel.

El sistema protésico utiliza en su colocación un armado en base a un marco que limita los movimientos involuntarios que se realicen en los cortes óseos mientras dura el procedimiento, lo que permite una maximización en el uso adecuado del implante. «Esto permite, además, que más médicos subespecialistas del sistema público puedan realizar esta cirugía con mayor seguridad, lo que se traduce en una menor tasa de complicaciones y en una real solución para las personas», asegura Carlos Villarroel.

Entre los beneficios de la prótesis lateral de tobillo destaca un menor riesgo asociado a la herida quirúrgica, menor complicación de las partes blandas, una marcha precoz posterior a la cirugía y por consecuencia una mejor calidad de vida.